Averiguar cómo gastar menos dinero en la compra puede ahorrarte miles de euros cada año. Por ello, lo primero es presupuestar lo que gastas en tus compras en el supermercado para ayudar a la salud financiera de tus ahorros.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas del Reino Unido, una persona gasta una media de en torno a 123 € mensuales en la compra, es decir, unos 31 € semanales. Por cada miembro adicional de tu familia, esta cantidad se duplica.
En otras palabras, mientras que una pareja gasta unos 247 € al mes en la compra (123 € multiplicado por dos), un hogar de tres personas gasta unos 370 € y, uno de cuatro personas, casi 494 € mensuales... ¡y solo en el supermercado!
Empleando las cifras de arriba como referencia, si gastas unos 20 € en lugar de 30 € semanales en el súper, ahorrarás 40 € mensuales. ¡En términos anuales, podrás ahorrar más de 450 €!
Se trata de una aportación considerable a tus objetivos presupuestarios anuales, que pueden incluir amortizar un descubierto, ahorrar para un artículo de lujo o crear un fondo para emergencias.
Cómo crear una lista de la compra presupuestada
Antes de presupuestar tus compras mensuales en el súper, no está de más trazar un presupuesto financiero general para controlar mejor la salud de tus finanzas personales:
- Hacer un seguimiento de tus gastos mensuales para saber a qué destinas tus ahorros cada mes.
- Separar los gastos fijos de los variables (es decir, los gastos inamovibles, como el alquiler, son fijos; por otra parte, los gastos movibles, como las compras, son variables).
- Calcular cuánto quieres ahorrar en gastos variables cada mes.
Pone en práctica el presupuesto doméstico y medir tu progreso para ver si te estás ciñendo a él y hacer ajustes si fuera necesario. También puedes usar la regla 50 30 20 para tener más claro cómo distribuir tus gastos y ahorros a partir de tu sueldo neto mensual.
Si perfeccionas tu presupuesto doméstico, lograrás contribuir enormemente a tus objetivos de ahorro.
Cómo ahorrar en tu compra en el supermercado
Aquí tienes algunos consejos muy fáciles y puedes empezar a convertir en hábitos para ahorrar en el súper:
1. Planifica tus comidas semanales con una lista de la compra
Planificar tus compras de antemano es esencial. Antes de ir al súper, tienes que saber exactamente qué vas a comer esa semana, para poder calcular los costes previstos antes de empezar a gastar.
Esto reducirá la probabilidad de que te salgas de tu presupuesto y animará a tu creatividad con los tipos de comidas que vas a elaborar durante la semana.
2. Lleva la cuenta de lo que compras
Para no perder de vista cuánto estás gastando mientras compras, lleva la cuenta del precio de todo lo que metes en el carrito. Puedes utilizar la calculadora de tu teléfono o redondear todos los precios para que te resulte más sencillo sumarlos de cabeza. De este modo, evitarás los despilfarros accidentales.
3. Utiliza cesta en vez de carrito
Otro de los métodos que los supermercados emplean para que no ahorres en la compra es proporcionarte carritos y cestas sobredimensionados. Así parece que tengas menos artículos ya que, simplemente, no parecen llenar el espacio que los contiene.
La mejor forma de evitar este espejismo es elegir la opción más pequeña disponible, que suele ser una cesta. Si no hay y solo vas a comprar unos cuantos artículos pequeños, prescinde de la cesta y llévalos en las manos.
4. Echa un vistazo a los estantes inferiores
Los supermercados utilizan un truco para que te salgas de tu presupuesto: colocar los productos más caros al nivel de los ojos. Pero, si echas un vistazo al mismo tipo de alimento que se vende uno o dos estantes por debajo del nivel de tus ojos, advertirás que los precios suelen disminuir, y los productos más baratos están más cerca del suelo.
5. Compra la marca blanca
Un truco para ahorrar muy efectivo es comprar la marca blanca de los productos esenciales. Contrariamente a lo que parece, los artículos de marca blanca tienen la misma calidad que los de las principales marcas, la única cosa que varía es el precio.
6. Compara precios por peso
Una buena práctica para ahorrar en la compra es comparar los precios de los artículos por peso, no por el precio de venta. Normalmente, además del precio de venta, las cadenas muestran cuánto cuestan cada 100 gramos de producto.
Por ejemplo, si quieres comprar queso parmesano, pero hay dos tipos distintos, a 4 € y a 6 €, lo normal sería pensar que la opción más económica es el envase de 4 €. Sin embargo, cuando ves el precio por peso, te das cuenta de que, si bien el parmesano de 6 € cuesta 1 € por 100 g, el envase de 4 € sale a 2 € por 100 g.
Es decir, que aunque te cueste 2 € más, el envase de parmesano de 6 € es un 50 % más barato que el envase de 4 €, y te proporciona 200 g más por solo 2 € adicionales. Esta es la opción más inteligente, ya que el queso te durará más por menos.
7. Compara los precios entre supermercados
De todos es sabido que no todos los supermercados y establecimientos de alimentación tienen los mismos precios. Muchas veces, el precio del mismo producto varía muchísimo de una tienda a otra.
Visita distintos establecimientos y anota las diferencias de precios de los artículos que más sueles comprar. No tardarás en acostumbrarte a ir a varios supermercados dependiendo de los artículos que necesitas. Pero ojo: estos precios pueden variar en función de la temporada y, además, los supermercados hacen campañas de descuentos, como por ejemplo, una rebaja del precio en la segunda unidad del mismo producto.
8. Paga la compra en efectivo
Un consejo estupendo para ahorrar en la compra es utilizar el sistema de sobres de Dave Ramsey. Este método presupuestario te exige sacar tus ingresos mensuales del banco en efectivo y dividir dicha cantidad en varios sobres que se correspondan con tus objetivos presupuestarios.
Dicho de otro modo, se trata de contar con sobres para tus gastos fijos y sobres para tus gastos variables, como el ocio, la ropa, comer en restaurantes y la compra del supermercado. ¡Al pagar la compra con un importe fijo, es prácticamente imposible despilfarrar!
Hábitos que pueden ayudarte a ahorrar en la compra
Además de los consejos para ahorrarte dinero en el súper, también puedes aplicar estos hábitos en tu día a día para reducir tus gastos en la cesta de la compra:
1. Cocina platos más sencillos
Elaborar recetas complejas puede dilapidar el presupuesto de toda la semana, ya que estas exigen una larga lista de ingredientes.
Si quieres empezar a ahorrar en la compra, elige unas cuantas recetas sencillas, a la par que sabrosas; cosas que te encanten, pero que solo requieran un máximo de cinco ingredientes y con productos frescos.
O, mejor aún, cuando elijas las comidas que quieres preparar la semana que viene, opta por recetas que compartan algunos de los ingredientes, especialmente si se elaboran con alimentos de temporada. Así ahorrarás a largo plazo, ya que comprar en cantidades grandes suele salir más barato... ¡pero solo si aprovechas toda la comida que compras!
También puedes probar a planificar tus comidas semanales en forma de menú para tener una idea aproximada de los ingredientes que no pueden faltar en tu cesta de la compra.
2. Come menos carne
De todos es sabido que la carne es de los productos alimentarios más caros del mercado. Por ello, un buen truco es proponerte el reto de no comer carne, al menos, un día a la semana.
No solo ahorrarás dinero y mejorarás tu repertorio de recetas vegetarianas, sino que, además, puede que no te cueste tanto como parece y empieces a consumir menos carne.
3. Come antes de ir al súper
Nos pasa a todos: te suenan las tripas mientras asaltas los estantes, llenando el carrito de cantidades innecesarias de comida, pues el apetito te nubla el juicio. Sin duda, comprar con el estómago vacío es la forma más fácil de tener gastos innecesarios y salirte de tu presupuesto doméstico.
¿La solución? ¡Comer antes de comprar! Parece sencillo, pero puede marcar la diferencia. Incluso comerse algo tan insignificante como un plátano o una barrita energética antes de acudir al súper puede ahorrarte hasta 15 € en alimentos.
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