Cómo utilizar los ETF para mantener una cartera de inversión equilibrada
Tu cartera de inversión está equilibrada cuando se ajusta a tus parámetros de riesgo. Kevin D. Flynn, inversor profesional, te muestra cómo una combinación de ETFs adecuados puede ayudarte a lograrlo.
9 min de lectura
La creación de una cartera de inversión equilibrada comienza con un análisis del riesgo del inversor. Dado que tu tolerancia al riesgo difiere de la de otros inversores, un enfoque genérico no te va a funcionar. Puedes utilizar un modelo de cartera genérico si estás gestionando tú mismo las inversiones, pero tus beneficios no serán los óptimos si no tienes en cuenta el riesgo.
Profundicemos en este tema. Un matrimonio cuyos miembros tienen unos 40 años, con dos hijos y una hipoteca no puede permitirse asumir tanto riesgo como un soltero de 20 años. Los primeros podrían incorporar a su cartera inversiones más «seguras», como ETF y fondos de inversión. También es más probable que depositen dinero en una cuenta de ahorro a modo de fondo de emergencia.
Esto no significa que los ETF sean una mala inversión para los más jóvenes. Con una tasa de interés compuesto decente, una cartera de inversión en ETF puede crecer exponencialmente. En este artículo, repasaré los distintos tipos de ETF que hay y te daré algunos consejos para elegir los que más te convengan. También explicaré qué es una «cartera de inversión equilibrada» y por qué es importante.
Un «fondo de inversión cotizado», también conocido como ETF, es un conjunto de valores que cotizan en bolsa. Piensa en él como en un «cubo» de acciones y bonos. Los ETF pueden comprarse y venderse en cualquier momento del día, a diferencia de los fondos de inversión. Esto hace de los ETF una inversión de mayor liquidez para quienes se preocupan por la solvencia.
Los ETF son fondos gestionados sin elevadas comisiones de gestión. Según el Investment Company Institute (ICI), la tasa media de gastos de un ETF indexado en 2023 fue del 0,16 %, mientras que los fondos de inversión gestionados activamente tienen una tasa media de gastos del 0,66 %. Puede que no parezca mucho, pero se va acumulando con el tiempo. Los gastos deberían ser siempre un factor a tener en cuenta a la hora de seleccionar inversiones.
Una cartera de inversión en ETF es un fondo de inversión compuesto en su totalidad por ETF. Los asesores automatizados (bots) suelen adoptar este enfoque para minimizar el riesgo. Los humanos solemos tender más a mezclar acciones y ETF.
También podrías añadir bonos, fondos de inversión e inversiones alternativas. Más adelante hablaré de ello en profundidad. De momento, aquí tienes una lista de los distintos tipos de ETF que puedes comprar:
Mayores riesgos pueden generar mayores rendimientos, pero las inversiones de bajo riesgo pueden generar ingresos pasivos constantes. Tener una cartera equilibrada es una estrategia con la que divides tus inversiones entre ambos tipos de inversión. Por ejemplo, podrías tener algunas acciones de alto riesgo que generen rendimientos de dos dígitos, aunque también puedes perder dinero si se hunden. Comprar bonos de bajo riesgo contribuye a mitigar esa pérdida.
Un ejemplo clásico es el de una cartera 60/40 con un 60 % de acciones y un 40 % de bonos. Ese tipo de combinación fue el pilar básico de los asesores financieros durante décadas. Hoy día tenemos más opciones. El primer ETF, SPDR S&P 500 ETF (SPY), se lanzó en 1993. Bitcoin, una popular inversión alternativa, se introdujo por primera vez en 2008. Estas opciones han cambiado la forma en la que podemos equilibrar las carteras.
Lo que no ha cambiado es el concepto de tolerancia al riesgo. La Teoría Moderna de Carteras (Modern Portfolio Theory, o MPT), que existe desde la década de los 50, aboga por una distribución equilibrada de tus inversiones en acciones entre once sectores del mercado. Esa combinación sigue considerándose la piedra angular para construir una cartera de inversión equilibrada. Mitiga las pérdidas, aunque no garantice una maximización de las ganancias .
Los ETF ofrecen la misma diversificación que la inversión en diversos sectores del mercado, sin la carga añadida de tener que seguirle la pista a docenas de empresas diferentes. También son más rentables. Cada sector tiene al menos un ETF. Incluso puedes saltarte los sectores y utilizar ETF de renta variable que siguen índices bursátiles completos. SPY ha generado más de un 90 % de rentabilidad en los últimos cinco años.
La diversificación y el coste no son las dos únicas ventajas de la inversión en ETF. La liquidez también es una característica atractiva. Los ETF se negocian en bolsa igual que las acciones. Puedes comprarlos y venderlos en cualquier momento, siempre que la bolsa esté abierta. No puedes hacer lo mismo con los fondos de inversión o con activos físicos como coches, obras de arte o bienes inmuebles. Estos te hacen menos solvente. Los ETF tienen tanta liquidez como el dinero en efectivo.
Otro elemento atractivo de la inversión en ETF es la transparencia. Como los gestores de los fondos están obligados a revelar las participaciones que poseen, tú puedes verlas en tiempo real. Los ETF son también más eficientes fiscalmente porque su estructura minimiza las distribuciones de las plusvalías. La menor volatilidad de estos fondos «cubo» los convierte en una mejor inversión para «comprar y mantener».
Una de las últimas incorporaciones a esta estrategia de inversión son los ETF de US Spot Bitcoin. La SEC los aprobó el 10 de enero de 2024, y ya han dejado un gran impacto en el mundo de las inversiones. No te diré ni que los compres ni que los dejes de comprar, pero merece la pena echarles un ojo. Hay varios entre los que elegir, y pronto habrá más.
Invertir con éxito requiere investigación y adaptabilidad. Algunas situaciones del mercado son predecibles, mientras que otras llegan completamente por sorpresa. Tan solo en este siglo, ya hemos visto varios «cisnes negros» que han causado una volatilidad extrema en los mercados. No puedes evitarlos por completo, pero puedes minimizar tus pérdidas con las siguientes estrategias:El enfoque núcleo-satélite consiste en crear un «núcleo» de ETF de amplio mercado que proporcione un crecimiento estable a largo plazo, y añadir inversiones «satélite» con ETF de sectores específicos o industriales para aprovechar las oportunidades a corto plazo. Esta estrategia te permite mantener una base sólida en tu cartera de inversión, al mismo tiempo que aprovecha las tendencias del mercado que podrían generar mayores rendimientos.
Promediar el coste en euros o dólares (Dollar-Cost Averaging) es una estrategia de inversión en la que inviertes una cantidad fija de dinero a intervalos regulares (diarios, semanales, mensuales), independientemente de las condiciones del mercado. Este enfoque puede reducir el impacto de la volatilidad bursátil y disminuir el coste medio por acción a lo largo del tiempo. Los ETF facilitan la aplicación de esta estrategia porque proporcionan una exposición diversificada.
Esta estrategia no es para inversores novatos o reacios al riesgo. Los derivados, sobre todo las opciones de compra y venta, son complicados y difíciles de predecir. Las alternativas tampoco suelen ser estables, por lo que constituyen una apuesta arriesgada. Un buen ejemplo son los criptoactivos. Puedes ganar mucho dinero en poco tiempo, pero también perderlo con la misma rapidez. Asegúrate de que sabes lo que haces si vas a optar por este tipo de instrumentos financieros.En el mundo de la inversión nada es seguro. Los ETF suelen considerarse como una de las inversiones más seguras , pero no por ello dejan de entrañar riesgos. También hay algunos errores comunes a evitar cuando se utilizan los ETF para mantener una cartera equilibrada:
La pregunta que te tienes que hacer aquí es: «¿Qué es una buena cartera de ETF?». La respuesta es una cartera de inversión que se ajuste a tu tolerancia al riesgo, que esté equilibrada para minimizar la volatilidad del mercado y que aproveche la variedad de productos de inversión disponibles actualmente. Si esto te resulta confuso, puede que prefieras consultarlo con un asesor financiero. Si gestionas tus propias inversiones, investiga y no compres nada que te parezca sospechoso.
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¿Qué es una cartera de inversión en ETF?
- ETF de renta variable. Los ETF de renta variable (o Equity ETFs) son populares porque siguen la evolución de un índice bursátil, sector o industria. Por ejemplo, el S&P 500 suele tener una rentabilidad anual de dos dígitos (más del 10 %), y un ETF de renta variable del S&P 500 la igualaría.
- ETF de renta fija o de bonos. Los ETF de bonos siguen índices de deuda pública, corporativa o municipal. Los ETF de renta fija son similares a estos últimos, ya que siguen valores de renta fija.
- ETF de materias primas. Los ETF de materias primas (o Commodity ETFs) siguen el precio de materias primas como el oro, el petróleo o productos agrícolas. Algunos ETF de materias primas incluyen contratos de futuros en sus carteras.
- ETF sectoriales e industriales. Los ETF sectoriales e industriales son similares a los ETF de renta variable, pero se centran en sectores específicos, como la tecnología, la sanidad o la energía.
- ETF inversos y apalancados. Los ETF inversos —o de exposición inversa al mercado— y los ETF apalancados utilizan instrumentos derivados como opciones y futuros para aumentar la rentabilidad. Eso implica que el riesgo también sea mayor.
- ETF multiactivos. Este tipo de ETF es exactamente lo que indica su nombre. Un ETF multiactivo (multi-asset ETF) puede contener acciones, bonos, materias primas u otras alternativas.
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¿Qué es una cartera equilibrada?
Ventajas adicionales de la inversión en ETF
Estrategias para utilizar ETF en tu cartera
El enfoque núcleo-satélite
Promediar el coste en dólares
Estrategias de cobertura con derivados y alternativas
Errores comunes a evitar
- Diversificación excesiva. Aunque la diversificación es importante, el exceso de diversificación mediante la tenencia de demasiados ETF puede dar lugar a una superposición de participaciones y a una reducción del potencial en la rentabilidad. Apuesta por un enfoque equilibrado sin una complejidad excesiva.
- Ignorar los costes. Presta atención a los ratios de gastos y a los costes de negociación asociados a los ETF. Aunque los ETF suelen ser rentables, las comisiones pueden acumularse y afectar a tu rentabilidad global. También puede haber comisiones de transacción si estás negociando en una plataforma minorista.
- Perseguir el rendimiento. Evita la tentación de perseguir los ETF de alto rendimiento. Céntrate en tu estrategia de inversión a largo plazo y sigue tu plan de reparto de activos. La mayoría de los asesores financieros recomiendan el enfoque «set it and forget it» (prepáralo y olvídate).
- Falta de investigación. No todos los ETF son iguales. Investiga a fondo para asegurarte de que los ETF que eliges se alinean con tus objetivos de inversión.
Conclusión
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POR KEVIN D. FLYNNKevin D. Flynn es asesor de servicios financieros, escritor independiente y antiguo coach en tecnologías financieras para RIA y gestores financieros.
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