Cómo las mujeres de las generaciones milenials y Z están reinventando su relación con las finanzas
La situación económica actual de muchas mujeres jóvenes es completamente distinta a como era hace tan solo un par de décadas,
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Los datos hablan por sí solos, la vida de las mujeres hoy en día es muy diferente a como era hace tan solo un par de décadas, pasando desde la forma de gestionar su dinero hasta la elección de la maternidad. El mundo al que se enfrentan las mujeres milenials y de la generación Z supone todo un nuevo horizonte de oportunidades y limitaciones desde un punto de vista financiero. Esto no solo afecta a su estilo de vida, sino también a la concepción que tienen de la riqueza. Sigue leyendo para saber cómo está cambiando su visión y su relación con las finanzas.
El status quo de la riqueza de las nuevas generaciones
Muchos jóvenes viven una situación económica compleja que ha influido enormemente en su estilo de vida y sus decisiones. Comparado con los baby boomers, la tasa de nupcialidad de los mileniales ha caído un 39 %; el porcentaje de propietarios de vivienda ha sufrido un descenso de casi el 30 %; la tasa de natalidad ha alcanzado los niveles más bajos del siglo y un 60 % de los mileniales sin hijos dice que no quiere tenerlos porque es demasiado caro. Este cambio de estilo de vida ha tenido un efecto dominó, haciendo que las mujeres milenials y de la Gen Z aborden las finanzas de forma diferente. Mientras que un 41 % de mujeres con alto poder adquisitivo de la generación baby boomer tiene previsto dejar parte de su patrimonio a sus hijos, tan solo un 15 % de las milenials con el mismo nivel adquisitivo tiene pensado hacerlo.
Cambiando la definición de riqueza
Al igual que la forma de enfrentarse a las finanzas ha cambiado, el concepto de riqueza también lo ha hecho. Comparada con generaciones anteriores, las milenials prefieren invertir en experiencias y no en propiedades. Ambas generaciones, la Zy la milenial, priorizan tener un buen equilibrio entre su vida personal y su vida laboral antes que un salario más elevado. Además, también le dan gran importancia a las cuestiones sociales y la responsabilidad corporativa por parte de las empresas. Para ellas la definición de riqueza es mucho más amplia y va más allá del valor monetario.
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La riqueza de las mujeres milenials y Gen Z mejora poco a poco
A diferencia de generaciones anteriores, gracias a Internet, los milenials y Z tienen acceso a más información que nunca. Esto implica que la educación financiera también es más democrática, y en su caso eligen cursos en online, podcast o redes sociales para informarse y aumentar sus conocimientos en finanzas. Esto es especialmente importante para las mujeres, ya que, históricamente, se han enfrentado con obstáculos sistemáticos para alcanzar la independencia económica y la igualdad salarial. La buena noticia es que las mujeres milenials y Gen Z se sienten mucho más seguras de sí mismas que las mujeres de cualquier otra generación a la hora de financiar sus futuras necesidades. La mejora del acceso a recursos, una creciente representación, el cambio de las convenciones de género y las políticas de igualdad salarial han ayudado a que las últimas generaciones de mujeres alcancen un nivel de independencia económica al que las generaciones anteriores no tenían acceso.
El efecto positivo de la pandemia en las mujeres y su riqueza
La pandemia del covid-19 ha tenido también alguna que otra consecuencia sorprendentemente positiva. El acceso a información financiera es más fácil y esto parece haber afectado positivamente a la confianza de muchas mujeres jóvenes en sí mismas. En 2020, un 23 % de mujeres se sentían preparadas para cubrir sus futuras necesidades financieras. En 2022, este porcentaje aumentó al 36 % y las mujeres de las generaciones milenial y Z destacaron como las más seguras. Además, antes de la pandemia, un 56 % de las milenial y las Gen Z afirmaron que se sentían seguras a la hora de gestionar sus finanzas, llegando esta cifra al 71 % en 2022. La causa de esta tendencia no está del todo clara, pero podría deberse al hecho de que haber vivido una crisis tan extrema haya acentuado la necesidad de las mujeres jóvenes de tener más control sobre sus finanzas.
Los activos de las mujeres milenials están en aumento
Otro factor muy importante que contribuye al aumento de la riqueza de las milenials respecto a generaciones anteriores es que el número de mujeres emprendedoras y de empresas lideradas por mujeres también ha aumentado. Solo un 37 % de las baby boomers con alto poder adquisitivo generó riqueza a través de los negocios. Sin embargo, no podemos olvidar que las generaciones de mujeres anteriores se enfrentaron a muchos obstáculos para poder acceder al mercado laboral. Por su parte, la cifra de mujeres milenial ha aumentado un 50 %. Un informe de Microsoft muestra resultados similares que indican que un 76 % de milenials y Gen Z aspiran a ser sus propios jefes.
Aumento de la prosperidad, pero ¿para quién?
La situación es cada vez más positiva, pero no todo es de color de rosa. La riqueza acumulada por los baby boomers pasará gradualmente a sus descendientes de la generación milenial, lo que equivale a hasta 68 billones de dólares en los próximos 30 años. Se espera que para 2030, los milenials sean cinco veces más ricos que en la actualidad. Pero esto sólo beneficiará a aquellas personas susceptibles de recibir una herencia. Un 77 % de mileniales y un 72 % de la Gen Z cree que la brecha entre ricos y pobres está aumentando en sus países. Una brecha debida a la herencia podría aumentar aún más este desequilibrio dentro de la generación milenial.
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