Crear una tienda online puede ser una buena opción si quieres empezar a vender tus propios productos sin una gran inversión inicial o si estás pensando en empezar un pequeño negocio. Puede parecerte una odisea si no tienes experiencia pero montar una tienda online es mucho más sencillo de lo que piensas. Sigue leyendo para conocer los pasos para crear una tienda online y sobrevivir en el intento.
Antes de empezar, ¿qué es una tienda online? Una tienda online es un comercio que vende sus productos a través de internet, ya sea desde una página web, en una app o a través de las redes sociales. Hoy en día la mayoría de tiendas físicas también cuentan con una versión digital que les ayuda a llegar a más clientes y a generar más ingresos a parte de los que reciben por sus ventas en el establecimiento. Y es que el e-commerce no para de crecer en nuestro país. Según datos del INE, en 2020 las compras online alcanzaron un 23,5 % sobre el total de compras realizadas en España. No solo es la cantidad de gente que opta por comprar a través de plataformas digitales sino también el volumen de facturación que genera: en tan solo diez años las empresas españolas de comercio electrónico han pasado de facturar poco más de 6.000 millones de euros en 2008 a más de 41.500 millones en 2018.
Aunque los números hablan por sí solos, no te dicen mucho sobre cómo abrir una tienda online por tu cuenta. Lo que sí te indican es que si eliges esta opción, lo estarás haciendo en un sector en pleno auge. ¡Vamos a ver cómo crear una tienda online desde cero!
7 pasos para montar una tienda online
Para empezar tu andadura en el sector del e-commerce tendrás que hacerte varias preguntas. Estas cuestiones te ayudarán a planificar los aspectos más importantes:
1. ¿Qué quieres vender?
Aunque es bastante obvio, antes de crear una tienda online tienes que decidir qué vas a vender en ella. Es el primer paso y el más importante, por eso lo más recomendable es que lo pienses con detenimiento: busca, compara y vuelve a buscar más información acerca de los competidores, la saturación de mercado, los precios, los ingresos que generan otras empresas que venden productos similares… Estas son solo algunas de las cuestiones que tienes que tener en cuenta. En el momento en el que empieces con tu investigación, irán apareciendo más aspectos. Cuanta más información recopiles, mejor.
Una vez hayas decidido el qué, tienes que pensar en cómo la vas a llamar. Elige un nombre para tu marca. Mejor si es fácil de recordar (y de pronunciar). Después haz una búsqueda rápida para comprobar si el dominio está disponible. Esto te condicionará bastante a la hora de elegir el nombre de tu tienda, así que es muy importante que lo hagas antes de decidirte.
2. ¿A quién?
Al crear una tienda online tan importante es el qué como el quién. Puedes tener un producto increíble pero si no hay personas interesadas en adquirirlo, entonces no tienes nada. Es el momento de pensar a qué público te vas a dirigir. Esto no significa simplemente la edad ni la localización geográfica, sino también sus intereses, los aspectos demográficos, socioeconómicos, culturales, su conducta de compra, los dispositivos que prefieren para comprar online (web, móvil o tablet)...
Encuentra tu target e investiga sobre él hasta la saciedad. Cuanto más sepas sobre tus clientes potenciales, mejor podrás conectar con ellos, darte a conocer y lo más importante: vender.
3. ¿Cómo lo vas a vender?
¡Ya tienes el producto (en mente)! Ahora toca pensar en cómo vas a venderlo. Para abrir una tienda online tienes que buscar una plataforma digital de e-commerce. Aunque existe la opción de crear una tienda online sin acudir a estas webs de comercio electrónico, el esfuerzo en tiempo-dinero que requiere, no vale la pena. Únicamente se valoraría esta alternativa si cuentas con los recursos y los conocimientos necesarios.
En cuanto a estas plataformas, las opciones son muchas: Shopify, PrestaShop, TiendaNube, Wix, WooCommerce… la lista se podría alargar casi infinitamente. Lo más recomendable es que hagas tu propia búsqueda y elijas la opción que mejor se adapte a tus planes: quieres pagar o no por la plataforma, tienes experiencia en diseño web o prefieres una interfaz más sencilla. Cada una de ellas te ofrece diferentes posibilidades que tendrás que evaluar dependiendo de lo que estés buscando.
También tendrás que pensar en el precio y el método de pago. En cuanto al primero, lo más lógico es que hagas una búsqueda para ver los precios de los competidores y también tengas en cuenta el coste de producir los productos (si son propios) o de adquirirlos a un proveedor. El margen entre el coste de producción y el precio de venta al público, determinará los ingresos que recibirás tras la venta. ¡Piénsalo mucho y bien!
Siguiendo con los pasos para montar una tienda online, no puedes olvidarte del método de pago. Para darte alguna pista, y según datos del Observatorio Cetelem eCommerce 2020, los métodos de pago más populares son Paypal (46 %), tarjeta de débito (27 %) y tarjeta de crédito a fin de mes (13 %). Así como dato.
Una pasarela de pago sencilla e intuitiva impulsará tus compras y reducirá los “abandonos de carrito”. No alargues demasiado el proceso de pago con formularios infinitos y errores inesperados. Ve al grano: información personal, dirección, método de envío y método de pago. Si puede ser todo en una misma página, todavía mejor.
4. ¿Cuándo vas a empezar?
La primera vez que te hiciste (o te hagas) la pregunta de “cómo crear una tienda online” es probable que no te hayas planteado en si podría llegar a hacerse realidad. Es decir, el “cuando”. Aunque ahora mismo solo estés en una fase de reflexión, es importante que si finalmente te decides a dar el “sí, quiero” te marques plazos. En definitiva, planificación.
Como habrás podido comprobar hasta ahora, montar una tienda online requiere de un alto grado de organización ya que hay muchos aspectos en juego. Piensa bien (y de forma realista): qué presupuesto tienes para empezar, qué esperas conseguir con este negocio, cómo vas a gestionar la tienda (necesitas más equipo o una persona es suficiente), cuáles son tus perspectivas con respecto a los beneficios (y a los gastos)...
Hazte una lista con todas las preguntas que se te vengan a la mente. Después intenta responderlas lo más sinceramente posible. Es un buen punto de partida para gestionar expectativas futuras.
5. ¿Dónde vas a vender?
Vender por internet te da la posibilidad de llegar a muchísima más gente que si lo hicieras en una tienda física. En este punto también tendrás que tomar la decisión de dónde vas a vender, es decir, la política de envíos y devoluciones. ¿Solo envíos nacionales? ¿Al extranjero? ¿Envíos gratuitos o no? ¿Cómo se puede hacer un cambio o una devolución?
Esto lo podrás decidir cuando hagas tu investigación de mercado y puedas valorar qué países o regiones pueden tener público interesado en comprar tu producto.
6. ¿Por qué quieres vender ese producto?
Hoy en día está (prácticamente) todo inventado. Y si crees que no, ya lo descubrirás por tu cuenta cuando hagas tu primera búsqueda. Por eso, a la hora de abrir una tienda online es importante que te diferencies del resto. ¿Cómo? Con tu marca, con tu producto (si puedes y es lo suficientemente innovador), con tu propósito. En definitiva, con tu propuesta de valor.
Define claramente por qué vendes los productos que vendes, qué se llevan los clientes al adquirirlos (además del artículo en sí), qué motivación te empuja a abrir tu tienda. Escribe tus USP, o unique selling proposition (propuesta de venta única), de forma que cualquier persona que entra en tu página web entienda al instante qué vendes, por qué y cómo va a mejorar su vida.
Tampoco tienes que descubrir la pólvora: puede ser algo tan sencillo como que tus productos estén fabricados a mano, sean sostenibles o apoyen alguna causa social con los ingresos percibidos por las ventas. Eso sí, elige algo porque de verdad sientes una conexión con la causa y no porque esté de moda. ¡La honestidad vende bien!
7. ¿Qué requisitos necesitas cumplir?
Por último y no por ello menos importante, también tendrás que tener en cuenta los aspectos legales de crear una tienda online. Aunque lo más recomendable es que acudas a profesionales del ámbito para que te asesoren con todas las de la ley, hay un par de aspectos que tendrás que hacer sí o sí.
Para que lo tengas ya en mente, tienes que darte de alta como profesional autónomo en la Seguridad Social, o también conocido como alta RETA (Alta de trabajador en el régimen especial de trabajadores autónomos). También tienes que hacer el alta censal en la Agencia Tributaria bajo el régimen de actividad de comercio electrónico.
Cuentas para autónomos en N26
Abrir una tienda online es un proyecto empresarial en toda regla. Eso sí, está al alcance de cualquiera o al menos de los que tienen la ilusión, las ganas y están dispuestos a emplear su tiempo en la aventura de emprender. Si estás pensando en empezar tu propio negocio, en N26 tenemos varias cuentas bancarias diseñadas especialmente para autónomos. Y es que N26 es una entidad colaboradora con la Seguridad Social, lo que significa que puedes pagar tu cuota de autónomo directamente desde tu cuenta, así como pagar la contribución a la Seguridad Social si tienes personas contratadas.
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Lo más importante es que con cualquiera de ellas tendrás el control absoluto de las finanzas de tu negocio y sin la necesidad de perder el tiempo con papeleos ni visitas a la sucursal. Ahorra tiempo al gestionar todo desde tu móvil e inviértelo en triunfar con tu empresa. ¡Con las compras que hagas con tu cuenta para autónomos recibirás entre 0,1 % y 0,5 % de reembolso en tus compras!
