Compra, renting o leasing de coches, ¿qué es mejor?

Hoy en día, quien quiera hacer recorridos relativamente largos sin quemar mucha caloría, puede optar por opciones tan variadas como el transporte público o medios de transporte de aparición más reciente como las bicicletas, las motos y los patinetes eléctricos. Las personas que se decidan por alternativas más clásicas como el coche, ya no tienen por qué comprar uno para desplazarse en su día a día. Hoy te contamos cuáles son las principales diferencias entre el leasing, el renting y la compra de un coche para que no te tiemble el pulso si algún día debes enfrentarte a tan peliagudo dilema.

El renting es básicamente un alquiler de vehículos de larga duración cuyo pago se realiza mensualmente. Estas cuotas mensuales incluyen el seguro del coche, gastos de mantenimiento o de reparaciones y gastos secundarios como la matriculación del vehículo.

Y aunque el pago de estas cuotas no supone un desembolso tan importante como el relacionado con la compra de un coche, no se trata del único argumento a favor o en contra de comprar un coche.

Poco importa que se trate de un coche de segunda mano o de kilómetro cero, comprar un vehículo tiene unas implicaciones bien distintas a las del renting y supone una decisión casi tan importante como la compra de una vivienda o la próxima candidatura de España a Eurovisión.

Para saber qué es mejor, comprar un coche o el renting de vehículos, existen una serie de parámetros a tener en cuenta para tomar la decisión acertada en función de tus necesidades específicas:

• Tiempo: esta es una de las cuestiones más importantes a considerar, ya que para que la compra de un coche salga rentable, hay que conservarlo una media de diez años. Por eso te recomendamos que si todavía no tienes la seguridad de querer un coche pequeño para moverte por tu ciudad o una furgoneta camper de segunda mano para recorrer Europa durante las vacaciones, el renting puede ser la opción ideal hasta que tengas claras tus preferencias.
• Uso: como no es lo mismo coger el coche dos o tres veces en semana para ir al gimnasio o quedar con tus amigos que utilizarlo como herramienta de trabajo, el uso que quieras darle deberá lógicamente determinar tu decisión. Por eso te recomendamos que pienses dos veces para qué necesitas un coche nuevo antes de comprarlo en lugar de alquilarlo mediante leasing o renting.
• Gasto: en este caso, no se trata únicamente del coste que suponga la compra o el renting de un vehículo, sino de la manera en que tengas que afrontar el gasto. Si no te sientes capaz de gastar una cantidad considerable de dinero o de adelantar la entrada e ir pagando las mensualidades, el renting puede ser tu mejor opción, ya que te permite el alquiler de un vehículo por una cuota mensual relativamente baja.

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A diferencia del renting, el leasing permite alquilar un vehículo con la opción de comprarlo después de la finalización del contrato de alquiler. Y lo cierto es que aunque la compra del vehículo pueda parecer una alternativa poco atractiva en un primer momento, merece la pena planteársela, ya que solo será necesario cubrir el valor residual del coche para convertirse en su propietario. 

• Leasing de tipo abierto: el contrato de este tipo de leasing establece la obligación de comprar el vehículo cuando finalice el periodo de leasing por una cantidad de dinero acordada previamente.  
• Leasing de tipo cerrado: como seguramente os estéis oliendo, en el leasing de tipo cerrado no es obligatorio comprar el coche cuando se acaba el contrato. En el caso de que el vehículo sea devuelto con un kilometraje demasiado elevado o con roturas y desgastes, será necesario pagar una sanción.

Como la opción a compra de un vehículo no es la única diferencia para decidir si hacerse con un coche de leasing o renting, a continuación te dejamos un recuadro con el que facilitarte la decisión:

*Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica

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