¿Puedo recuperar el dinero de mis vacaciones si me toca mesa electoral el 23 de julio?

El adelanto electoral anunciado por Pedro Sánchez después de las elecciones del pasado 28 de mayo nos pilló a muchos con el pie cambiado. Quien más, quien menos, todos teníamos las vacaciones de verano más o menos organizadas a esas alturas del año. Si tu reserva de dos semanas en un apartahotel en Denia, de un curso de buceo en el Mar Rojo o de un crucero por los fiordos noruegos coincide exactamente con las elecciones generales que se celebran este año, no dejes de leer este artículo para averiguar por qué motivos puede uno estar exento de fichar en una mesa electoral y cómo puedes recuperar el dinero de tu reserva si no puedes escaquearte.

Las mesas electorales están compuestas por un presidente y dos vocales encargados de supervisar las votaciones de los ciudadanos y contar los votos después del cierre de la mesa electoral. Cada miembro de la mesa electoral tiene, además, dos suplentes para el caso en el que el presidente o uno de los vocales no puedan presentarse a la mesa electoral el día de las elecciones.

Según el artículo 26 de la Ley Electoral del Régimen Electoral General (LOREG), “El Presidente y los vocales de cada Mesa son designados por sorteo público entre la totalidad de las personas incluidas en la lista de electores de la Mesa correspondiente”. Hablando en plata: toda persona menor de 65 años que no se presente a las elecciones, que no haya tenido el privilegio de formar parte de una mesa electoral en al menos tres ocasiones durante los últimos diez años, que no tenga una baja laboral, que no ejerza una profesión esencial o que no esté internada en un centro penitenciario o en un hospital psiquiátrico se expone a ser elegido de forma aleatoria para recibir una carta certificada el 1 de julio como tarde en el que le anuncien la buena nueva.

Es innegable que la perspectiva de tirarse un domingo del mes de julio más de 12 horas en un colegio electoral con una temperatura media de 35 grados puede resultar tan tentadora como una ruta de senderismo en los Picos de Europa o una fideuá en el Delta del Ebro. Sin embargo, si formas parte del grupo de electores llamados a participar en la jornada electoral en las próximas generales pero tienes otros planes en mente para ese fin de semana, no existen muchas más razones aparte de las mencionadas anteriormente para librarte, como verás a continuación:

• Incapacidad: cualquier persona en una situación de discapacidad, de incapacidad permanente absoluta y de gran invalidez o de incapacidad temporal para el trabajo, estará automáticamente exenta de supervisar una mesa electoral como vocal o presidente.
• Periodo de gestación: las mujeres que hayan superado el sexto mes de embarazo no estarán obligadas a ejercer como presidente o vocal.
• Cuidado de personas: todo elector o electora que se encargue del cuidado de niños menores de ocho años, de personas con discapacidad o de familiares de hasta segundo grado que hayan sufrido un accidente, que sean de edad avanzada o que padezcan una enfermedad, estará exento de ser llamado a una mesa electoral.
• Orden de alejamiento: supongo que no chocará a nadie descubrir que si alguien tiene una orden de alejamiento contra una persona censada en su mismo colegio electoral, no podrá cumplir con su deber como elector.

Como las elecciones no suelen caer en pleno verano, la Junta Electoral Central ha decidido hacer una excepción para las próximas elecciones generales del 23 de julio. Esto implica que los votantes a los que les haya tocado ser presidente, vocal, suplente o interventor y que tengan un viaje planeado para esas mismas fechas podrían librarse del marrón. Y decimos podrían, porque para lograrlo es necesario haber reservado las vacaciones antes del 29 de mayo, día de la convocatoria de las elecciones y demostrar que el viaje no puede ser cancelado.  Cumplir con ambos requisitos no te garantiza tampoco que vayas a disfrutar de unas merecidas vacaciones, ya que si no es posible cubrir tu mesa electoral, deberás olvidarte de tus planes estivales para formar parte de la fiesta de la democracia.

Según la Ley Electoral, quien no cumpla con su deber de presidente, vocal o interventor ni justifique su ausencia se expone a una pena de cárcel que oscila entre los 3 y los 12 meses o a una multa que será definida por el juez. 

Así que si no has logrado que te excluyan de ir a tu mesa electoral a pesar de haber reservado tus vacaciones, lo único que puedes hacer es tratar de recuperar el dinero de tu reserva.

Aquellas personas que hayan contratado un seguro de cancelación de su reserva, podrán recuperar su dinero fácilmente aportando los documentos que prueben que han sido llamadas a una mesa electoral. En el caso de que se trate de un viaje en familia, se devolverá lógicamente la cantidad íntegra de la reserva.

En un reciente comunicado, la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) afirmó que ser llamado a ocupar una mesa electoral constituye una causa de fuerza mayor, lo que significa que las compañías aéreas o los hoteles no tienen derecho a exigir que el cliente haya contratado un seguro de cancelación para anular su reserva y devolverle su dinero. Aún así, existe la posibilidad de que tanto la aerolínea como el hotel no den fácilmente su brazo a torcer y que se llegue incluso a juicio para recuperar el dinero de las vacaciones.

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