La gran renuncia: la realidad financiera detrás de las personas que dejan su trabajo sin tener otro
Seguro que últimamente has visto y oído cada vez más casos de gente que deja su trabajo priorizando su felicidad personal. Te explicamos la razón en este artículo.
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Desde hace ya un par de años, las redes se han ido inundando de vídeos virales que muestran a personas anunciando su dimisión a bombo y platillo, así como de miles de reportajes y artículos que tratan sobre la gran renuncia o big quit, término acuñado por Anthony Klotz, psicólogo y profesor asociado de la UCL School of Management de Londres. Todo este contenido sobre el tema no ayuda necesariamente a comprender los motivos que se esconden detrás de este movimiento social. En el artículo de hoy te contamos qué es exactamente la gran renuncia y qué motivaciones explican este fenómeno sin precedentes.La pandemia de Covid-19 conmocionó a la población mundial. Además del incontable número de muertes que sumió en una profunda tristeza a millones de familias a lo largo y ancho del planeta, la irrupción del virus transformó profundamente nuestra manera de relacionarnos y de ver el mundo que nos rodea. Cuarentenas, toques de queda, tests de antígenos hasta para ir al baño, cierre de escuelas y universidades, limitaciones en los viajes, democratización del teletrabajo… Todas estas medidas que fueron aplicadas para frenar la expansión del covid, tuvieron consecuencias que todavía pueden sentirse en la actualidad.Y ahí entra en juego “the great resignation” o la gran renuncia como se le conoce en español. Con la relajación de las restricciones mencionadas anteriormente, la vuelta a la oficina durante el primer trimestre del 2021 se convirtió en una realidad ineludible para millones de trabajadores. Este cambio en la política de muchas empresas no tuvo en cuenta que los meses de confinamiento en casa no habían servido únicamente para que sus empleados se pasaran el día trabajando en pijama y cocinando bizcochos, ya que también habían supuesto una ocasión especialmente propicia para replantearse sus condiciones de vida. Aspectos como la conciliación familiar, el aprovechamiento del tiempo libre o los desplazamientos entre el domicilio y la oficina, pasaron a ser factores determinantes a la hora de mantener un trabajo o de buscarlo, lo que acabó empujando a muchas personas a dimitir de forma masiva.A pesar de que este comportamiento social tiene su origen en Estados Unidos con la renuncia de alrededor de 12 millones de personas sólo entre los meses de marzo y julio del 2021 hasta alcanzar la impactante cifra de 50 millones de dimisiones durante ese año, la gran renuncia ha acabado por desembarcar en nuestro país en proporciones mucho menos elevadas. Por citar sólo unas cifras, según la Seguridad Social, en la primera mitad del 2022 38.575 personas dejaron su trabajo y, aunque esta cifra pueda parecer irrisoria en comparación con los datos provenientes de EE.UU, supuso un aumento del 110 % con respecto al año anterior. Estas cifras no han hecho todavía sonar las alarmas en España pero según Yolanda Díaz, ministra de Trabajo, “España necesita 109.000 trabajadores. Parte de estas vacantes son del sector de la hostelería, pero hay otras que tienen que ver con necesidades de personal altamente cualificado vinculado a la transformación tecnológica y digital”.Como anunciamos al principio del artículo, nuestro objetivo no consiste en crear alarmismo alrededor de este fenómeno relativamente reciente, sino más bien en tratar de conocer los contextos económicos y financieros de aquellas personas que deciden dejar su trabajo sin haber encontrado un nuevo empleo.La edad de los trabajadores, el hecho de que tengan hijos o no o su situación financiera a la hora de tomar la decisión de abandonar su trabajo, son lógicamente factores que les permitirán dar el paso hacia un cambio de vida radical al modificar su relación con el trabajo. Aunque resulte difícil de creer en un primer momento, uno de los principales motivos que explican esta tendencia de dejar el trabajo masivamente es la falta de estabilidad económica. Mientras que en España la indemnización por despido aumenta en función de los meses trabajados, en Estados Unidos solo puede cobrarse en caso de discriminación. Esto implica que muchos trabajadores estadounidenses están dispuestos a dejar su trabajo al no tener nada que perder. Más allá de las diferencias en las realidades sociales y económicas que pueda haber entre los países en los que se ha producido la gran renuncia, existen determinados patrones y situaciones que nos permiten comprender mejor este cambio de paradigma:Cada uno es libre de ganarse su pan como buenamente pueda. Lo que a lo mejor no le resulta agradable a todo el mundo es andar controlando su dinero continuamente. En N26 tratamos de hacer que gestionar tu dinero te resulte lo más cómodo y agradable posible. Descubre en un par de clics cuáles son tus hábitos de gasto gracias a la funcionalidad Estadísticas y obtén una instantánea mensual de tu cuenta con el Resumen del mes, para saber exactamente a dónde se va tu dinero. Échale un vistazo a las cuentas bancarias N26 para ver cuál se adapta mejor a tus necesidades.
¿Qué es la gran renuncia?
La gran renuncia en España
Qué se esconde detrás de la gran renuncia
- Salarios insuficientes: con el aumento del coste de vida provocado por la inflación derivada de la pandemia y de la guerra en Ucrania, muchas personas y familias han visto cómo sus ingresos cubrían a duras penas gastos tan básicos como el alojamiento o la alimentación. Es cierto que la gran dimisión designa en principio la renuncia al trabajo por parte de personas que todavía no han encontrado un nuevo empleo, pero cuando los sueldos son realmente bajos, cualquier cambio será a mejor.
- Cambio generacional: si algo caracteriza a los millennials y a la generación Z es la inestabilidad, y aunque esta característica pueda parecer negativa, resulta especialmente útil para adaptarse a una realidad tan cambiante. Todo esto influye también en las perspectivas laborales de estas generaciones, ya que se muestran mucho más dispuestas a cambiar de carrera cuando se sienten insatisfechas profesionalmente.
- Conciliación: como mencionamos antes, por mucho que los sucesivos confinamientos provocados por la pandemia pusieran nuestros nervios a prueba, si para algo sirvieron fue para que pudiéramos replantearnos nuestra concepción del trabajo. Tanto es así que el teletrabajo o el trabajo híbrido han pasado a convertirse en argumentos de peso para cambiar de trabajo.
- Redes sociales: poco importa que nos refiramos a Instagram, facebook, LinkedIn o incluso Tiktok; las redes sociales han revolucionado la manera en que nos relacionamos en el seno de nuestras sociedades hasta el punto de hacernos sentir hiperconectados los unos con los otros. Esta hiperconexión ha contribuido también a dar una mayor exposición a los movimientos sociales y la gran renuncia no es ninguna excepción.
- Cambio de prioridades: además de los cambios que se han producido en nuestra percepción de las condiciones de trabajo ideales para desear o no un cambio laboral, los acontecimientos como la pandemia han modificado profundamente la forma en que consideramos nuestro trabajo y su impacto en el mundo. Si bien es verdad que mucha gente se ha mudado al campo para poder teletrabajar con el trinar de los pájaros como sonido de fondo, muchos otros lo han hecho para cambiar completamente de ocupación y dedicarse por ejemplo a la producción de miel, de queso de cabra o de calcetines y bufandas de lana de alpaca.
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